Praga es una ciudad muy bonita, pero la torre de televisión de žižkov no es muy hermosa que digamos; no solo tiene la forma de un par de horribles chimeneas sino que esas pequeñas protuberancias son 10 esculturas de unos espeluznantes bebés sin rostro escalando (gateando).

La torre fue construida en la segunda mitad de los 80’s, tiene 260 metros de altura y el genio detrás de los bebés fue el escultor checo David Cerný quien ha probado no ser igual al resto.
Mas imágenes después del salto:

Enlace: Ever seen a Creepier Tower