“Los alrededores de la columna de la independencia será la pasarela donde las concursantes del certamen de belleza mostarán sus vestidos el próximo domingo”.
Los mexicanos tendrán un adelanto de lo que será la competencia de trajes típicos de 80 países que lucirán las aspirantes al Miss Universo, quienes los modelarán este domingo en un acto público en los alrededores del Ángel de la Independencia.
El monumento, ubicado en una de las principales avenidas de la capital, tendrá una gran tarima alrededor, con pasillos que conectarán a un hotel cercano desde donde saldrán las concursantes, se informó el lunes.
La idea original era hacer un desfile en la plancha del Zócalo, en el corazón del casco histórico capitalino y una de las plazas más grandes y antiguas del continente. Sin embargo, por “problemas de logística”, se decidió cambiar el lugar, dijo Alejandra Barrales, secretaria de Turismo de la capital, en una rueda de prensa.
“Igual que el Zócalo, el Ángel de la Independencia es un espacio emblemático y representativo de nuestras tradiciones, nuestro arte y nuestra cultura”, enfatizó la funcionaria.
El Ángel de Independencia fue inaugurado en 1910 y el año pasado atravesó una intensa remodelación que duró siete meses a un costo aproximado de 4 millones de dólares. Es el sitio preferido por los mexicanos para encabezar marchas de protesta, celebrar las victorias del equipo nacional de futbol y de los distintos partidos políticos.
Previo al desfile se espera un acto artístico del que no se ofrecieron detalles.
La actividad podrá verse en dos pantallas gigantes que se colocarán cerca de la tarima para que más personas puedan apreciar los vestidos, que se distinguen por ser de los más llamativos de la competencia.
El jurado que evaluará los trajes y escogerá el más vistoso no es el mismo que elegirá a la próxima reina de belleza, dijo Esther Swan, portavoz de prensa de la organización Miss Universo.
No se ha anunciado quiénes serán los miembros del jurado.
La ganadora de la competencia de traje típico recibirá un trofeo la noche final, el 28 de mayo, en el Auditorio Nacional de la capital mexicana.
La candidata de México, Rosa María Ojeda, no quiso adelantar en la rueda de prensa cómo será el nuevo diseño de su vestido, luego que el modelo elegido levantara una gran pugna por contener imágenes de un suceso violento que separó a los mexicanos y que enaltecía a los católicos contra los laicos.
El traje largo con cinturón de balas, decorado con bosquejos de ahorcamientos por el levantamiento católico en la década de 1920, indignó a mexicanos que lo catalogaron de mal gusto e inapropiado para el máximo concurso internacional de la belleza.
Los críticos sostuvieron que el vestido glorifica la violencia en un país aquejado por los enfrentamientos entre bandas de narcotraficantes, responsables de una ola de asesinatos y decapitaciones en todo el país.
La controversia motivó el cambio del diseño.
Noticia de El Universal
todas las aspirantes son muyyyyyyyyyyyyy hermosas