Aunque Aaron Fotherinham esté atado a una silla de ruedas, no es razón para que deje de hacer lo que más le gusta, “patinar”, para esto le adaptaron una silla de ruedas a la que se ata y realiza giros espectaculares.

Para que vean que la incapacidad de hacer las cosas no está en las limitaciones físicas sino en la actitud de las personas. Muchos quisiéramos poder hacer la mitad de los trucos que él aún con todas nuestras extremidades funcionando.

Hard Core Sitting | Vía Projectionist