De acuerdo a un estudio en E.U. las mujeres que se ponen implantes de senos son casi 3 veces más propensas a cometer suicidio que otras mujeres.
El estudio se hizo al analizar las actas de defunción de más de 3,500 mujeres suecas que se operaron entre 1967 y 1993.
De acuerdo con lo investigado la tendencia de suicidio aparece a los 10 años de haber obtenido los implantes.
Loren Lipworth del centro médico de Tennesse cree que las mujeres que se ponen implantes en primer lugar es muy probable que tengan problemas psiquiátricos, vinculados a la baja auto-estima y desórdenes de la imagen corporal.
Siempre he creído que alguien que se hace una operación estética alguna vez, sentirá el deseo de hacerse otra y otra porque el problema no está en el cuerpo sino en la aceptación.
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